Después de varios meses con ellas empiezan a decirnos adios. La migración prenupcial de la grulla común ha comenzado y los que en octubre y noviembre las vimos llegar ahora las vemos marchar. Da un poco de pena decirles adios tan pronto, este año dan la sensación de ir bastante adelantadas.
Esta mañana las he oido en Zaragoza. Sobre las 13 h. he abierto la claraboya y un gran bando cruzaba hacia el norte a gran altura. Era muy numeroso y resultaba extraño oirlas entre tanto edificio, más acostumbrado a esta banda sonora por Gallocanta. Pincha en las imágenes para ampliar.
Así pues toca ya decirles adios... y buen viaje
Estoy de acuerdo, cuando se ama y respeta la naturaleza ver como las grullas se van es triste.
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