Nuestra
salida de campo la programamos con la idea de visitar una zona que ya
conocíamos, porque está cerca de nuestros pueblos y porque es un lugar
precioso, y también porque la habíamos visitado en otras ocasiones para
colaborar en la localización y seguimiento anual de una planta: el geranio Erodium glandulosum.
El geranio Erodium glandulosum. Las Parras de Martín (Foto: PEH) |
El
seguimiento de esta planta (a través del programa de ciencia ciudadana LIFE
RESECOM del IPE-CSIC), lo lleva José Antonio Sánchez, y en esta ocasión el
motivo de la visita venía dado por la búsqueda de una especie de mariposa (de
la que luego hablaremos), que es la Aricia
morronensis (asociada a la planta citada).
Realizando el seguimiento anual del E. glandulosum. 17/06/2017 (Foto: PEH) |
Para esta labor contábamos con la
presencia inestimable de nuestro amigo Deme Vidal, biólogo, naturalista,
anillador,… bueno sería complicado citar todas sus “facetas”, una de ellas
precisamente la de “experto conocedor” de mariposas. Y tanto que lo es!! …explicaciones
magistrales sobre las mariposas, su comportamiento, biología, … bien atentos
que estuvimos (pese a que en ocasiones se nos escapaba algo del vocabulario).
Deme explicando las características de nuestro objetivo del día, la mariposa (Foto: PEH) |
Pero no
todo son plantas y mariposas, la jornada, en la que nos juntamos siete adultos
y tres pequeñajos, nos deparó numerosas sorpresas, desde el pequeño Museo
Paleontológico de la pequeña localidad de Cuevas de Portalrubio, la
contemplación de una pareja de alimoches en su nido en los cortados del
Chorredero, el refrescante baño en el Río de Las Parras (más bien remojada de
pies… qué fría!), el sonido de los abejarucos sobrevolando al atardecer
mientras las cabras miraban expectantes,… o el curioso movimiento en su tela de
la Argiope bruennichi (araña tigre),
que dejó prendado a los curiosos ojillos del pequeño Mateo.
Fotografiando la araña tigre (Foto: AAM) |
Pero
vamos a hablar un poco de nuestra protagonista del día, que, por cierto,… no se
dignó a aparecer. Aunque nos quedamos un poco “chafaos”, pues nos hubiera
encantado localizarla, también son cosas que suelen ocurrir y también es un
dato (que habrá que volver a comprobar) el hecho de que no estuviera presente.
Hay que
decir que la provincia de Teruel, por su diversidad de ambientes, es una de las
comunidades europeas más ricas bajo el punto de vista lepidopterológico (“mariposil”).
Se han documentado más de 1.200 especies de mariposas (podrían ser hasta 2.000
si incluyéramos las polillas). Una de ellas es precisamente Aricia morronensis.
La ciencia ciudadana, a través de numerosos
proyectos, está ayudando a conocer y conservar la biodiversidad de numerosos
espacios peninsulares, entre ellos el Sistema Ibérico. Hay programas de
seguimiento de plantas, a través del LIFE RESECOM coordinado por el IPE-CSIC, como
el del Erodium glandulosum (planta nutricia de nuestra protagonista) en Las
Parras de Martín, por ejemplo, y también de mariposas, a través del Butterfly
Monitoring Scheme (BMS), en la zona de Castelfrío (Sierra del Pobo), por citar
algún ejemplo de los muchos que podríamos poner.
Aricia morronensis (Ribbe, 1910), es una pequeña mariposa de la familia de las Lycaenidae, conocida también como “Morena
española”. Se trata de un endemismo ibérico, cuyas poblaciones y distribución
se van conociendo cada vez más, con los nuevos hallazgos y descubrimientos.
Mariposa muy variable, con una envergadura alar de 22
- 26 mm. El macho tiene el anverso de color marrón oscuro, con un punto
discoidal negro, generalmente rodeado de blanco, en el ala anterior y dos
pequeñas manchas anaranjadas en el ala posterior. Las fimbrias son ligeramente
ajedrezadas. El reverso es de color de fondo marrón claro con puntos negros
rodeados de blanco, con el margen anaranjado y con una cuña blanca
característica en la zona postdiscal. La hembra tiene lúnulas anaranjadas más
marcadas en el anverso del ala posterior, y en ocasiones también en el ala
anterior.
Vive en laderas pedregosas, desfiladeros y praderas,
siempre en zonas calizas, desde 1100 hasta más de 2000 metros.
Vuela desde junio a septiembre, en una generación al año. Dado el tipo de hábitat que frecuenta, de escasa presión humana, no es probable que esta especie se encuentre en peligro, y las posibles incidencias se centrarían en la sobreexplotación ganadera, el coleccionismo, el cambio climático y los incendios. Los imagos visitan, en compañía de otros licénidos, gran variedad de flores, entre ellas las de cardos y Astaráceas. Su vuelo suele ser cercano al suelo. El comportamiento sexual de los machos es de tipo patrullador. La puesta de huevos tiene lugar de uno en uno, normalmente en el haz de las hojas, pero también en el envés o en las flores. Las orugas son generalmente verdosas con líneas longitudinales claras y oscuras. Se asocian con hormigas de los géneros Lasius, Tapinoma y Crematogaster y pueden practicar el canibalismo. Como plantas nutricias se han citado varias especies del género Erodium (Geraniáceas), como Erodium glandulosum, Erodium carvifolium, Erodium castellanum, Erodium daucodium, Erodium valentinum, etc. La crisálida es de color verde o pardo con líneas dorsal y laterales más oscuras. La pupación se produce en un capullo formado con seda y materiales cercanos (hojas secas, piedrecillas), y está colocado debajo de piedras. Inverna como larva.
Vuela desde junio a septiembre, en una generación al año. Dado el tipo de hábitat que frecuenta, de escasa presión humana, no es probable que esta especie se encuentre en peligro, y las posibles incidencias se centrarían en la sobreexplotación ganadera, el coleccionismo, el cambio climático y los incendios. Los imagos visitan, en compañía de otros licénidos, gran variedad de flores, entre ellas las de cardos y Astaráceas. Su vuelo suele ser cercano al suelo. El comportamiento sexual de los machos es de tipo patrullador. La puesta de huevos tiene lugar de uno en uno, normalmente en el haz de las hojas, pero también en el envés o en las flores. Las orugas son generalmente verdosas con líneas longitudinales claras y oscuras. Se asocian con hormigas de los géneros Lasius, Tapinoma y Crematogaster y pueden practicar el canibalismo. Como plantas nutricias se han citado varias especies del género Erodium (Geraniáceas), como Erodium glandulosum, Erodium carvifolium, Erodium castellanum, Erodium daucodium, Erodium valentinum, etc. La crisálida es de color verde o pardo con líneas dorsal y laterales más oscuras. La pupación se produce en un capullo formado con seda y materiales cercanos (hojas secas, piedrecillas), y está colocado debajo de piedras. Inverna como larva.
Aricia morronensis. (Foto: Asturnatura.com) |
Distribución
Es
un endemismo de la Península Ibérica, Andorra y parte de Francia. En la
Península está presente en la mayor parte de los sistemas montañosos,
habiéndose descrito varias subespecies. Se ha citado en numerosas localidades,
a partir de la típica de Sierra Espuña (Murcia), tales como Sierra Nevada
(Granada), Riaño (León), Sierra de Gredos (Ávila), Valle de Ordesa (Huesca), Sierra
de Andía (Navarra), Soria, Almería, Orense y Teruel, donde se ha citado en
varias localidades: Castelfrío (Sierra del Pobo), Guadalaviar y Villar del Cobo
(Sierra de Albarracín), y Sierra de Javalambre. En nuestra salida de campo
queríamos comprobar si en la población de Erodium glandulosum de Las Parras de
Martín (Estribaciones Sierra de Sant Just) podíamos encontrarnos a Aricia
morronensis. Pero, pese a nuestras esperanzas e ilusiones,… no la localizamos.
Un pretendiente tardío frente a una cópula entre dos congéneres suyos. (Foto: Roberto Travesi) |
Protección
Esta
especie se encuentra incluida en la Revisión del Libro Rojo de los Lepidópteros
Ibéricos en la categoría de endemismo, y en el Libro Rojo de las mariposas
europeas en la categoría SPEC 4a (Especies europeas endémicas no amenazadas).
La expedición al completo. (Foto: auto, JASS) |
Pilar Edo y cía.
1 comentario:
¡Otra pequeña joya!
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