Natura xilocae

Journal of observation, study and conservation of Nature Lands Jiloca Gallocanta (Aragon) / Journal de l'observation, l'étude et la conservation de la nature et des Terres de Jiloca Gallocanta (Aragon) / Journal der Beobachtung, Erforschung und Erhaltung der Natur und der Lands Jiloca Gallocanta (Aragon) / Gazzetta di osservazione, lo studio e la conservazione della natura e Terre Jiloca Gallocanta (Aragona) / Jornal de observação, estudo e conservação da Natureza e Jiloca Terras Gallocanta (Aragão)

viernes, 1 de agosto de 2025

E.A. OJOS DE LA RIFA. JULIO 2025. UN BUEN AÑO DE CRÍA.

Termina julioEl ciclo fenológico sigue su invariable curso en los prados de la Rifa, en Caminreal. 

Para la mayoría de las especies ha terminado la reproducción. Los pollos, con mayor o peor fortuna, van dándose vida mientras terminan de crecer. Los adultos, exhaustos tras la crianza, se recuperan y comienzan a renovar sus plumas preparándose, unos para la migración, otros para la llegada del invierno. 

Julio es también, sobre todo en su segunda quincena, el comienzo de la migración para muchas especies. Es el momento de la marcha de las poblaciones locales del Jiloca y el del reemplazo temporal por otras. También es el tiempo del tránsito hacia tierras africanas de aquellas especies que criaron en territorios más septentrionales y que no lo hacen en la zona.

Por eso en julio suelen producirse los máximos mensuales absolutos en cuanto a capturas. Ya ocurrió en 2024 cuando registramos 325 aves (¡¡¡el 26,0% de todo el año!!!) y, por lo que vamos viendo, también en 2025 pues en este mes 355 ejemplares han pasado por nuestras manos, el máximo mensual.

Seguimos recibiendo visitas de nuestros amigos, algunos bien jovencicos

Este es el segundo verano en la Estación de Anillamiento de los Ojos de la Rifa (EAOR). Ya sabemos, n = 2. Es pronto para sacar conclusiones. Pero sí que podemos apuntar que la cría en los Ojos de la Rifa y, en general, en la vega de Caminreal, no ha ido mal. Al menos mejor que lo fue el año pasado. Si se parte del principio de que la mayoría de los ejemplares que presentes en julio son locales podemos decir que -con ciertas cautelas- que la relación entre adultos y jóvenes es un indicador de la productividad en la zona. En 2024, un año de primavera seca, bajo nivel de agua en los prados y con una severa afección del cañizar por el fuego, el 40,6% de los ejemplares capturados en julio fueron jóvenes. En 2025, con una primavera lluviosa que ha inundado los prados hasta junio y que ha permitido la recuperación del carrizal, la proporción de jóvenes capturados ha ascendido hasta el 54,4%.

Estas semanas de julio la vida bulle en el humedal y en los prados húmedos de su entorno.


Las altas hierbas terminan su desarrollo y comienza su floración ...

Salicaria (Lythrum salicaria)

Una mirada atenta permite contemplar la enorme variedad de insectos que encuentran su hábitat en estas praderas ...






Esta abundancia de insectos y de otros invertebrados es la base de la dieta alimenticia de los pequeños depredadores, entre los que se encuentran las aves, el objeto de nuestro estudio. Y también de cazadores de mayor talla, como la culebra de escalera.


En los secanos que rodean a los prados termina ya el ciclo agrícola. Las cosechadoras recogen el grano de cereal ...


y las empacadoras preparan las pacas de paja ...


Sin embargo, en los reganos, los panizos, alfaces y patateras ...


... se desarrollan rápidamente aprovechando el gran número de horas de luz, las altas  temperaturas y el agua que aportan las bombas a los aspersores.

En lo meteorológico, julio ha seguido la pauta de temperaturas pero no en cuanto a las lluvias siendo muy húmedo a base de tormentas. 

Las temperaturas (Tm = 21,7ºC) han sido ligeramente inferiores respecto a las habituales (Tm = 22,9ºC, serie 1993-2025 en Estación Meteorológica Puente Romano de Calamocha). Las jornadas de anillamiento coincidieron con días muy soleados. Para evitar el solazo buscábamos la sombra del caseto del pozo y cuando no fue posible montamos la carpa que trajo Lourdes o la sombrilla de José Antonio. Auténticos lujos.


En cuanto a las precipitaciones ha sido un mes de lluvias abundantes asociadas a episodios tormentosos. En la citada y próxima estación meteorológica calamochina se registraron 69,7 mm, más de tres veces de la precipitación media en este mes (22,9 mm). El pluviómetro de Antonio, en Caminreal, ha recogido 63,3 mm lo que ha hecho el mes más lluvioso de año actual y el julio de mayor precipitación de los 28 años de la serie registrada.

Tormenta en la vega de Caminreal, de la que nos libramos en la EAOR, por cierto.

En lo ornitológico, como decíamos, ha sido un buen mes, más por cantidad que por variedad. Aunque también ha habido sorpresas.

En las jornadas de la primera quincena (1-2 julio) se capturaron 142 ejemplares de 12 especies. Esperábamos más, la verdad, pues la jornada equivalente de 2024 fue extraordinaria (213 ejemplares). La tarde del 1-J estábamos casi todo el equipo preparados para una boyerada como la que se produjo el 10.07.2024. Y no fue tal. Seguramente por adelantarnos en fechas. 


En las jornadas de la segunda quincena (19-20 julio) se capturó un total de 213 ejemplares de 14 especies. Entre unas y otras, en este mes de julio se registraron 355 aves -como ya se ha dicho- de 19 especies

Es decir, en julio de 2025 se obtuvo mayor abundancia, mayor riqueza y mayor productividad que en el mes equivalente de 2024. 


Como ya ocurrió el año pasado, dos especies concentran el mayor número de capturas (60%): la lavandera boyera y el carricero común, los dos pájaros más comunes en estos ambientes palustres. Nada nuevo. Aunque conviene destacar algunas interesantes particularidades en ambos casos.

En primer lugar, destaca la boyerica (Motacilla flava) con 131 registros, siendo 122 ejemplares los que se anillaron y 9 los que ya portaban anillas (todas fueron autocontroles). Dos de cada tres ejemplares registrados en julio (65,6%) fueron jóvenes, porcentaje que ascendió al 80,7% en la segunda quincena. 


En julio de 2024, un mes en el que el número total de capturas fue inferior al de 2025, se anilló el doble de boyericas (263) que el año actual, con una proporción de jóvenes del 38,4%. Sendas paradojas. 

Para interpretar estos datos debemos considerar, en primer término, que cuando concluye la cría y antes de iniciar la migración, las lavanderas boyeras (jóvenes y adultas) comienzan a concentrarse en los prados de la Rifa (y en otros carrizales) donde se juntan para dormir. Sospechamos que son ejemplares que provienen de la vega de Caminreal (no sabemos si también de la de Torrijo del Campo y Fuentes Claras) pues durante el resto del día el número de estas motacílidas en la EAOR es muy discreto. Las capturas se producen prácticamente durante la última vuelta de la tarde (anochecer) y la primera de la mañana (amanecer). La menor proporción de jóvenes y el elevado número de capturas en dormidero de julio de 2024, un año con una primavera y un inicio de verano muy secos, pueden explicarse si se considera que los carrizales de otros prados menores no llegaron a ofrecer hábitat reproductor adecuado ni llegaron a funcionar como dormidero al concluir la crianza concentrándose entonces en los Ojos de la Rifa. Resumiendo, las boyericas han criado mejor en 2025 al disponer de una mayor superficie de prados húmedos en el conjunto de la vega del Jiloca y encontrar lugares alternativos para juntarse para dormir.

En julio de 2025 el carricero común (Acrocephalus scirpaceus) ha sido la segunda especie en cuanto al número de capturas (82), presentando una proporción de jóvenes del 43,9%. El grado de control de los carriceros comunes en este año está siendo muy alto. Un dato. En la primera quincena, casi la mitad de las aves registradas (15 de 32) ya portaban anilla propia, a pesar de que 10 de ellas eran jóvenes. 


Las cifras de julio de 2025 han sido muy superiores a las obtenidas el año pasado, cuando se registraron tan solo 24 ejemplares, de los que el 33% fueron jóvenes. Este acrocefálido tiene su hábitat en los cañizares que prosperan en los terrenos con suelo empapado durante buena parte. El encharcamiento de los prados durante el invierno y buena parte de la primavera ha favorecido el desarrollo del carrizo, especialmente en aquellos sectores que habían sido afectados por los incendios. En suma, 2025 también ha sido un buen año para la cría del carricero común en los prados de la Rifa. La pequeña anécdota con esta especie nos vino cuando encontramos un ejemplar de edad 5 la mañana del 20.07.2025 que portaba una anilla ajena (aunque de una serie cercana a las nuestras). Como bien sospechamos había sido anillado por nuestro compañero Carlos Pérez Laborda (como edad 3) en Tornos el verano anterior (23.08.2024). Nos preguntamos si se trataría de un ejemplar que ya iniciaba el viaje migratorio. Cada dato genera nuevas pregunta   

La tercera especie en cuanto a número de capturas (71) ha sido el gorrión moruno (Passer hispaniolensis) de las que el 54% han sido ejemplares jóvenes. 


Las capturas se han repartido entre las dos quincenas (30 y 41). También se han distribuido a lo largo de las distintas horas en las que las redes estuvieron abiertas. 


El comportamiento de este pasérido en la EAOR no deja de sorprendernos. El número de autocontroles es bajísimo. De los 164 gorriones morunos que llevamos anillados tan solo hemos recapturado ...¡¡¡ dos !!!. Esto nos sugiere que la población nidificante en la zona es muy grande. Igualmente nos llama la atención que el número de capturas de julio de 2025 ha sido diez veces superior al de julio del año pasado (7). La nidificación de este gurriato en los Ojos de la Rifa este año no es que haya sido buena ... ha sido excelente. 

El gorrión moruno es una especie muy interesante en cuanto a su distribución geográfica.

El color salmón, presencia durante primavera-verano. En azul claro, presencia durante la invernada. En color morado, presencia durante todo el año. Fuente: Birds of the World

Como puede verse en el mapa, en la península Ibérica es una especie que se haya circunscrita al cuadrante surooccidental. Sin embargo, durante las dos últimas décadas está experimentando una expansión hacia el este peninsular, como muestran los mapas siguientes:


Es conocida la colonización del gorrión moruno de las comarcas del Jiloca y de Campo de Daroca. En Caminreal, Antonio descubrió una colonia en una chopera próxima a los Ojos de la Rifa, próxima al nido de una rapaz. El elevado número de capturas estivales, su tendencia creciente y la ausencia de la zona durante la mayor parte del año nos sugieren muchas preguntas. Desde luego, es una de las especies más interesantes en la EAOR. 

En este se han capturado 23 ejemplares de gurriato de reclija o gorrión molinero (Passer montanus) de los que 7 han sido jóvenes. De nuevo, estas cifras han sido muy superiores a las registradas para el mismo mes de 2024 cuando se registraron tan solo 4 ejemplares. 


Julio nos ha ofrecido las mejores cifras (12) en lo que llevamos de año para el ruiseñor de acequia (Cettia cetti), de los que 5 ejemplares han sido jóvenes. Es notablemente superior a la obtenida (3) el mismo mes de 2024.


Igualmente bien parecer haber respondido el buitrón (Cisticola juncidis) al desarrollo de la vegetación de los prados de la Rifa. En este mes se han capturado 9 ejemplares, jóvenes 4 de ellos. Estas cifras contrastan con la ausencia de capturas en la EAOR en julio de 2024.


Entre las especies que están presentes en los Ojos de la Rifa exclusivamente durante su migración queremos destacar el carricerín común (Acrocephalus schoenobaenus). En las jornadas de la segunda quincena fueron capturados 6 ejemplares, tres de ellos jóvenes. Estábamos advertidos por Carlos Pérez Laborda de que había pasa en esos días en la laguna de Gallocanta por los resultados que estaba obteniendo en su estación de anillamiento de los Lagunazos de Tornos.


Lo esperábamos hace mucho tiempo. Era el momento. Y ocurrió. El 20.07.2025 entre en las redes del sector 1 un ejemplar joven de buscarla unicolor (Locustella luscinioides). Es la primera cita de la especie en la EAOR. La conocíamos, de haberla capturado en la laguna del Cañizar. Es, como el caso del carricerín común, un ave que tan solo está presente en nuestras comarcas durante los pasos migratorios. Una especie tan discreta y esquiva que no es fácil de observar. Con ella, ya son 57 las especies anilladas en nuestra estación.



Conforme avanza julio se aproximan a los prados de la Rifa en busca de alimento algunos ejemplares jóvenes de algunas especies de pájaros, que no suelen verse mucho en otro tiempo. Es el caso del picapuerco pequeño (Lanius senator). Fue el caso de un ejemplar anillado en la segunda quincena. Y, como suele ser habitual, aprovechó para dar buenos pizcos durante su manejo. 


Y también el de un jovenzano de golondrina común (Hirundo rustica), que debió dejarse llevar por los bandos de boyericas y entró con ellas al dormidero.


Otra especies fueron extraídas de las redes en las jornadas de anillamiento de este mes. Casi todas habituales, como el ruiseñor común (Luscinia megarhynchos) (5, casi todos jóvenes), el carricero tordal (Acrocephalus arundinaceus) (2, ambos autocontroles), la cardelina (Carduelis carduelis) (1 jovenzano), el cagamangos (Saxicola rubicula) (4, todos jóvenes), la chillandra (Petronia petronia) (2 adultos), el gurrión de pùeblo (Passer domesticus) (1), el zarcerico (Hippolais polyglotta) (2), el chichipán (Parus domesticus (1 jovenzano) y el triguero (Miliaria calandra) (1).


Finalmente, como viene siendo habitual, la EAOR ha funcionado como un punto de encuentro de amigos (14 en las dos primeras jornadas, 18 en las segundas) en el que todos vamos aprendiendo y descubriendo los muchos pequeños secretos que esconde la avifauna de este humedal. Y haciéndonos preguntas que, además de pasarlo bien, es de lo que se trata.

   

viernes, 4 de julio de 2025

E.A. OJOS DE LA RIFA. JUNIO 2025. IRRUMPEN LOS GORRIONES MORUNOS.

Termina junio. Finaliza la primavera y comienza el verano. Estamos en los días más largos de año, en torno al solsticio estival. El sol lo tenemos en su cénit, sus rayos nos llegan muy directos y hay muchas horas de luz, más de quince. Eso sí, los amaneceres y los crepúsculos son breves.


Junio es el momento de mayor actividad biológica en los prados húmedos de los Ojos de la Rifa. 

La mayoría de las plantas han terminado su desarrollo vegetativo y están inmersas en la reproducción, fabricando las flores, asegurando su polinización y la producción de semillas. En su mayoría son megaforbias palustres, plantas perennes, de gran porte y que forman comunidades exuberantes en suelos temporalmente encharcados.

Algunas tienen las hojas grandes, como la cardencha (Dipsacum fullonum) ...


la escrofularia mayor (Scrophularia auriculata) ...


el cardo zaiquero (Cirsium pyrenaicum) ...



la adelfilla pelosa (Epilobium hirsutum) ...


o la acedera (Rumex conglomeratus) ...


La competencia por la luz entre las plantas es tremenda. Todas crecen muy próximas y disponen de más o menos agua en el suelo. Un factor limitante es la luz. Algunas, como la corregüela mayor (Calystegia sepium) se encarama sobre otras plantas para conseguirlo ...


Una alta producción vegetal implica muchos recursos energéticos para los organismos consumidores. Una compleja comunidad de pequeños invertebrados herbívoros ...


... organizada en gremios ...


... se distribuye en todos los estratos del herbazal.


Abundancia de herbívoros implica muchas posibilidades para los carnívoros. Algunos son el motivo de nuestro estudio: los pájaros. Otros no, como esta pequeña culebra de escalera (Zamenis scalaris). 


En lo meteorológico el pasado junio ha sido un mes cálido, muy cálido. La temperatura media mensual ha sido 22,8 ºC, 4 grados más que la media de la serie 1993-2025 en la Estación Meteorológica Puente Romano de Calamocha, dándose 22 días con temperaturas superiores a los 30ºC. 


Junio ha sido cálido... y ¡superhúmedo!. En la citada estación calamochina hubo 11 días en los que se produjeron tormentas, de las que 3 fueron con pedrisco. Tantas tormentas dejaron 80,1 mm, casi el doble de la precipitación media mensual (48,0 mm). En el pluviómetro de Antonio en Caminreal, aún fueron algo mayores (84,5 mm).

Estas abundantes precipitaciones coincidieron con un momento del ciclo agrícola en el que los cultivos de cereal de secano (cebada, triticale, trigo) ya no necesitaban ser regados por estar en puertas de la siega...


Si no lo habían sido ya, pues las primeras cosechadoras comenzaron a entrar en los campos al inicio de la segunda quincena, sobre todo en aquellas parcelas más sobreabonadas de purín y con el suelo más suelto.


Con tanta lluvia del cielo, ni los jóvenes panizos... 


ni los pequeños girasoles...


ni los alfaces, en pleno rebrote tras su primer corte, necesitaban riego.


Conclusión: si entra agua al acuífero y durante un mes no se bombea para riego, el freático asciende y vuelve a inundar los prados. Los dábamos por secos hasta la otoñada. 


En las jornadas de los días 4 y 5 de junio, la regleta marcaba 0 cm. Sin embargo, en las de los días 23 y 24, el nivel alcanzó los 18,5 cm de altura.


Sospechamos que el aumento del nivel debió de producirse durante la última decena del mes. Y de forma súbita, pues los caracoles terrestres no dispusieron de mucho tiempo para alcanzar lugares no inundables.


Tantas tormentas hubo que, aunque planificamos las jornadas de campo para contar con buen tiempo, no llegamos a escaparnos de una que nos obligó refugiarnos unos minutos en los coches hasta que terminó el chubasco.

Las jornadas de junio también nos han traído nuevos amigos, que se han acercado a los Ojos de la Rifa para conocer la actividad de la estación de anillamiento. 


En la tarde de la segunda quincena hicimos una estupenda merendola en la que dimos buena cuenta del chorizo de León que trajeron Lourdes y Adrián y de la sidra asturiana... 

 

que trajo Chabier, de la que no dejamos ni gota...

    
...como no podía ser de otra forma en esta reconocida estación gastronómico-anilladora.

Pero a lo que estamos... ¿qué nos ha dejado junio en cuanto a las aves capturadas?

En las jornadas de los días 4 y 5 se registraron 59 individuos de 12 especies mientras que en las de los días 23 y 24 fueron 119 ejemplares de 11 especies. Entre unas y otras sumaron 178 aves de 16 especies

Esta cifra es algo mayor a la obtenida para el mismo mes en el año 2024 (148 aves de 14 especies) lo que podría estar relacionada con el mayor nivel y permanencia de agua del junio del año actual. 

Han sido jornadas de ratos tranquilos pero también de ratos con actividad intensa, de emplearse a fondo para gestionar cuanto antes a los pájaros.


La especie más numerosa ha sido el carricero común (Acrocephalus scirpaceuscon 54 aves capturadas, todas adultas, de las que 17 fueron aves a las que se les colocó anilla y 37 las aves recapturadas. Está muy "controlada" la población de carricero común en este sector de los Ojos Altos. Es una cifra netamente superior a la que se obtuvo en el año 2024 en el mismo mes (37) lo que sugiere que le ha beneficiado el encharcamiento más prolongado de este año.


La gran sorpresa llegó de la mano de los gorriones morunos (Passer hispaniolensis) con 43 capturas, 10 de ellas (ningún joven) en la primera quincena y 33 en la segunda (11 pollos volanderos). 


En junio de 2024 fueron capturados en nuestra estación de anillamiento 14 gorriones morunos, una tercera parte. No sabemos darle explicación a este hecho.


En tercer lugar, hay que destacar las 27 boyericas (Motacilla flava) capturadas en el pasado mes, de las que 11 eran jóvenes del año (segunda quincena). La cifra de lavanderas boyeras registradas en junio del año actual es sensiblemente inferior a la que se obtuvo en el mismo mes del año anterior (40). Esto nos plantea una nueva pregunta. Si se trata de una especie propia de prados húmedos y campos de regadío, este año, con una superficie inundada más extensa deberían haberse capturado más ejemplares. Sin embargo no ha sido así. Aunque, también puede verse de otra forma. Una primavera lluviosa ha ofrecido más puntos con hábitat apropiado y la población reproductora de este sector del valle se ha repartido en una zona más amplia.


Al gurriato de reclija (Passer montanus) le ha ocurrido algo parecido que al moruno. En junio de este año han sido mucho más abundantes (22, 12 jóvenes) que en el mismo mes del año 2024 (4).


Igualmente ocurrió con el ruiseñor común (Luscinia megarhynchos) ...


... con 9 capturas en junio de 2025 y ninguna en 2024. Estos resultados podrían relacionarse con el escaso desarrollo del zarzal próximo al sector 1 de la EAOR tras el severo incendio de marzo del año pasado. En 2025, este zarzal no se ha visto afectado por el fuego y ha seguido creciendo hasta alcanzar una cobertura y altura de interés para este muscicápido. 
 
También el cisticola buitrón (Cisticola juncidis) ha aumentado en este año el número de capturas (4) en relación al mismo mes del año pasado (0), lo que asociamos igualmente al mayor mantenimiento de la lámina de agua.


Lo contrario le ocurrió a otras dos especies.

Por un lado, y de forma poco manifiesta, al triguero (Miliaria calandra) que ha pasado de 9 capturas en junio de 2024 a 2 capturas (ambas con prados secos) en el mismo mes de 2025.


Por otro, y de forma más acusada, al cagamangos (Saxicola rubicola) que de 22 ejemplares capturados en 2024 ha pasado a 2 en 2025.


Tanto el triguero como el cagamangos son pájaros propios de prados no encharcados salpicados de pequeñas matas. Parece claro que la inundación primaveral de este sector de los Ojos Altos no les ha gustado mucho y han dejado de acercarse al entorno de la EAOR.

Se completa la lista de capturas de junio con el carricero tordal (Acrocephalus arundinaeus) (4), el zarcerico (Hippolais polyglotta) (4), el ruiseñor de acequia (Cettia cetti) (2), la tordeja negra (Turdus merula) (1), el rojiñón o pajarel (Linaria cannabina) (1), el serín verdecillo (Serinus serinus) (1) y el gurriato (Passer domesticus) (1).

Junio nos ha dejado una novedad, la captura del único pícido ibérico que emigra, el torcecuellos (Jynx torquilla), un ejemplar que cayó en la red del sector próximo a las sargas y a la acequia en la tarde del 23 de junio. 


No fue esta la única sorpresa del mes. En la última vuelta del 5 de junio, en el interior de la nasa, encontramos un ejemplar de rascón (Rallus aquaticus). Nueva especie, nuevo género, nueva familia y nuevo orden (Gruiformes), por ser pariente lejano de las grullas.


Nos acercamos a julio. A ver qué nos deparan las últimas vueltas de las tardes, serán los días de los primeros vuelos de los jovenzanos y de la llegada de los primeros migrantes postnupciales. 


¡A cargar los frontales!