La temperatura ha ido descendiendo progresivamente hasta que he llegado a la cima. Allí el termómetro del coche tan sólo marcaba 4ºC y el viento era helador, soplaba muy fuerte, llegaría con facilidad a rachas de 50 o 60 Km/h. Vamos, que según las tablas, la sensación térmica era de 7 a 10 grados bajo cero.
Arriba había muy buena visibilidad. Las nubes pasaban muy rápido y el cierzo dejaba entre el techo nuboso y el suelo una buena panorámica, muy nítida. Esto me ha permitido practicar un poco de geografía prepirenaica. Podían observarse con absoluta claridad con ayuda del objetivo de la cámara los Mallos de Riglos (a 153 Km), Sierra de Guara (160 Km.) incluso unas lejanas cumbres nevadas del pirineo aragonés oriental (podría ser incluso pirineo catalán, a cerca de 200 Km.)
Aquí la Modorra de Cucalón:
Nubes acariciando la cima de la Virgen de Herrera:
Los Mallos de Riglos:
Sierra de Guara, a la derecha:
Cumbres pirenaicas orientales:
Ese era el espectáculo desde arriba. Subiendo, había bonitas panorámicas de los chopos cabeceros de la rambla de la Riera de Olalla y del marojal de Pelarda.
El campo está precioso, pese a que se nota que las lluvias no han sido tan importantes como en la rama occidental de la ibérica.
3 comentarios:
Venga Merops, la de las cumbres nevadas es para nota. Yo no he sido capaz de saber que son. Si no hubiese estado la capa de nubes, por proximidad a otras se hubiese podido saber, pero así...
Buenas,
muy majas las fotos ehh, se ven los Mallos y el Tozal de Guara perfectamente.
Haría fresco por allá arriba....
Muy buenas fotos, desde lo alto se ven increíbles estas zonas naturales.
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