Finales de mayo. Mañana de domingo. Nos acercamos con dos coches José Antonio y yo a Báguena y a Castejón de Tornos, donde empezamos el paseo. Él, para tomar fotos de animales y plantas para su identificación en Biodiversidad Virtual y después llevarlo a Biodiversidad en las Tierras del Jiloca. Yo, para preparar la ruta de senderismo naturalista que a los pocos días después realizaremos con los alumnos de 1º de Secundaria. Los dos a disfrutar de una mañana de pirmavera.
Dejamos los campos de Castejón de Tornos. Justo en la divisoria de aguas entre la cuenca endorreica de Gallocanta y el valle del Jiloca. Nos despide el peirón que se yergue sobre un cielo plomizo.
Las mieses están en pleno desarrollo mientras cuajan las flores con el polen que transporta el viento ...
Y nosotros nos encaminamos por el carril que desciende por la misma cabecera de la rambla de Valdeardiente (en Castejón de Tornos conocida como del Carrascalejo) dejando detrás alfaces y centenos ...
y pastos sin aprovechar al perderse el último rebaño de ovejas y nos internamos en el dominio de los matorrales abiertos y secos propios de la degradación de carrascal.
Es el dominio del tomillo ...
de la dedalera ...
o de la caberuela ...
sobre los que abundan los insectos libadores de néctar ...
o recolectores de polen ...
El camino desciende y se introduce en los peñascos. Se trata de materiales muy antiguos. Paleozoicos. Ordovícico Inferior y Cámbrico Superior, en este orden. Son rocas metamórficas formadas por transformación de sedimentos depositados en ambientes de plataforma continental entre hace 500 y 470 millones de años.
Las más tenaces son cuarcitas ...
Eso sí, cuarcitas bastantes esquistosas. Proceden del metamorfismo de las areniscas. Fracturadas por la gelifracción al quedar a la intemperie forman canchales que son difíciles de colonizar por la vegetación.
En algún afloramiento muestran indicios de plegamiento en alguno de los ciclos orogénicos. Como en este anticlinal decimétrico ...
Más comunes son las pizarras, procedentes del metamorfismo de las arcillas.
La regular alternancia de cuarcitas (areniscas) y de pizarras (arcillas) parece mostrar una serie de ciclos de avances del nivel del mar, depositándose entonces los materiales más ligeros, y de retiradas del mismo, llegando entonces materiales menos finos como las arenas.
En cualquier caso, todos fueron plegados y actualmente forman parte de un anticlinal kilométrico de dirección NO-SE por cuyo flanco suroccidental se han abierto paso las aguas superficiales creando el barranco de Valdeardiente.
Es el hábitat de los líquenes rupícolas propios de sustratos silíceos ...
Y de musgos que, asombrosamente, crecen en un medio con una gran limitación hídrica y una gran iluminación. Muy seco. Muy difícil.
Y de plantas rupícolas como el ombligo de Venus, con la espiga floral en pleno desarrollo tras consumir las reservas de agua acumuladas en la hoja durante el final del invierno ...
y de otras plantas que se instalan en las grietas del peñasco y florecen precozmente, como esta compuesta ...
En estos medios abiertos son abundantes los artrópodos, especialmente los saltamontes ...
las escolopendras ...
presas habituales de la lagartija colilarga y de los ardachos ...
En el fondo del barranco encontramos al arroyo completamente seco. No han ido suficientes la nevada de final de febrero y las lluvias de abril y mayo para recargar los acuíferos de manera que afloren en la cabecera del barranco. Sí que consiguen acceder las gazpoteras y las zarzas, que forman la avanzadilla del bosque de ribera ...
El ser humano también ha querido aprovechar el agua del subsuelo para obtener madera de obra en forma de chopos cabeceros que crecen incluso en estos remotos barrancos del Jiloca ...
Es el dominio del tomillo ...
Las más tenaces son cuarcitas ...
En algún afloramiento muestran indicios de plegamiento en alguno de los ciclos orogénicos. Como en este anticlinal decimétrico ...
En cualquier caso, todos fueron plegados y actualmente forman parte de un anticlinal kilométrico de dirección NO-SE por cuyo flanco suroccidental se han abierto paso las aguas superficiales creando el barranco de Valdeardiente.
Las carrascas crecen sobre los peñascos como si también fueran plantas rupícolas. Reventando con sus raíces la cuarcita, aportando cosechas de hojas secas que llegarán a formar suelo en sobre alguna repisa, ofreciendo sombra durante la canícula estival ... Imposible un medio más hotil. Pero ahí estaban.
Pero crecen mejor en aquellas laderas en las que se han llegado a acumular las arcillas y arenas que liberan las rocas al meteorizarse ...
Son ambientes con suelos más profundos, mejor regulados y menores pendientes. En los claros abiertos por el hacha y el ganado crecen prados que estallan en colores estos días de mayo ...
donde José Antonio pudo disfrutar tomando fotos ...
para ampliar la colección de coleópteros que publica en su blog Biodiversidad en las Tierras del Jiloca.
A nuestra izquierda queda un cultivo de pino negral y de pino rodeno que ya rondará las cinco décadas ...
Poco antes de llegar a la desembocadura con el arroyo el que baja de la Fuente del Villar, el de Valdeardiente comienza a llevar agua. En este paraje se abre paso entre pizarras que, al encontrarlas perpendiculares a su trazada, le crean pequeñas presas formándose, por tanto, pequeñas cascadas.
Aguas cristalinas ...
Un nuevo ambiente en el que José Antonio no descansa en busca de nuevas especies ...
En enclaves favorecidos el carrascal alberga a algunos rebollos que lucen sus lustrosas hojicas recién formadas ...
En esta partida, los vecinos de Castejón han hecho leña en el carrascal.
Cuando se abre el matorral cientos de semillas que han permanecido décadas aprovechan su oportunidad para germinar sobre un sustrato rico en humus (y en humedad) y bajo condiciones de intensa iluminación ...
Plantas herbáceas que crecen con rapidez, que fabrican abundantes azúcares, que mantienen a múltiples herbívoros ...
La humedad del suelo permite el desarrollo de un incipiente bosquete de ribera ...
pero se trata de un breve tramo pues muy pronto comenzamos a ascender de nuevo entre carrascas ...
quedando a la derecha el arroyo y nuevas repoblaciones de pinos, sobre las que se han realizado trabajos de apertura de pistas ...
¡Qué costosos resultan de mantener estos pinares!
Ya se atisba la vega de Báguena.
Sobre las últimas pizarras aflora el cantueso ...
Asoman los primeros cultivos. Algunos son viñas, otros campos de almendros. Los proyecto de personas que seguramente ya no viven. Proyectos abandonados por sus sucesores en tiempos de bonanza económica, en tiempos de emigración a la ciudad. Abandonos causados también por su escasa rentabilidad por tratarse de tierras malas y de campos muy alejados del pueblo.
Algunos de estos campos aún se labran y siembran de pipirigallo. Seguramente por cobrar la subvención en su momento. Como decía el experto en pastos Ignacio Delgado (CITA) es una buena decisión sembrar a esta leguminosa antes de abandonar los campos ...
pues favorece la formación de prados con posibilidades pascíciolas, protección de suelo y fertilización del mismo.
Seguimos bajando. Afloran conglomerados silíceos poco cementados y glacis que han sido puestos en cultivo con viñas ...
almendros ...
cebadas ...
y triticales ...
A nuestra derecha, sobre un cabezo de pizarras, se levantaba airosa una paridera abandonada ...
El corral cubierto de hierba. Hace tiempo que no entra el ganado. Pero con la cubierta en buen estado, aguantando hielos y cierzos. Altiva sobre el valle.
Nos metimos en el cubierto y encontramos la razón de ser de los chopos cabeceros que vimos un par de horas antes ... Las vigas, tan rectas, tan ligeras, tan bien conservadas ...
Salimos a la pista rural asfaltada que une Báguena y Castejón. Fuerte descenso entre cunetas libres de glifosato en las que crecían hermosas matas de pipirigallo que segamos para llevárselas a las gallinas.
Ya en la vega nos esperaban los cultivos de regadío. La patatas ya naciendo ...
y el alfaz esperando el primer corte ...
Tras cruzar el Jiloca ...
por el precioso puente rematamos la ruta en el bar de Báguena donde saboreamos una par de merecidas cervezas tras una buena andada naturalista.
José Antonio con cientos de fotos y yo con el paseo preparado para hacerlo con los chavales.
3 comentarios:
Bonito paseo! Qué ambientes más agradables y qué agradecida es la primavera desde la perspectiva de este verano interminable!
Muy detallado todo el recorrido,bonitas fotos!! Excelente trabajo. Recordar que en estas fechas casi otoñales esa rambla esta repleta de zarzamora siendo buen momento para recorrerla si te gustan sus frutos ;)
Los pulgones verdes están en hojas arcebuste ( gordolobo) son Aphis vervasci :
http://www.biodiversidadvirtual.org/insectarium/Aphis-verbasci-img799790.search.html
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